#POEMA - A MI QERIDA MADRE, EN EL MES DE LAS MADRES

May 03, 2016, 02:49 AM

A MI QERIDA MADRE, EN EL MES DE LAS MADRES

Treinta y siete Mayos, sin ti, Madrecita en los que soledad y tristeza, encontraron en este hijo tuyo su predilecta presa.

La mente mía conserva frescas aquellas acciones tuyas; las conservo con amor cual preciadas joyas.

Ese cariño maternal que solo en ti hallaba y que de paz alegría todo mi ser colmaba.

Ese bienestar que sólo a tu lado se respiraba, la paciencia con que tú mis defectos soportaba.

Ese ambiente hogareño que a tu alrededor giraba; ese consejo sabio y oportuno que de tus labios brotaba.

Esa ternura y calor humano que siempre en ti hallaba; ese compartir las circunstancias en las que reía o lloraba.

Esa preocupación sincera por evitar cuanto me incomodaba; esa convicción en tus palabras cuando para la vida me preparaba.

De eso y de todo cuanto de una buena madre se recibe, carece desde treinta y siete mayos atrás quien este poema escribe.

Te fuiste sin darte cuenta que yo aún te necesitaba; para enfrentarme al mundo preparado todavía no estaba.

En cada rostro femenino que pasa frente a mí, tengo la grata sensación de hallar algo de ti.

A mi lado están con frecuencia mujeres muy buenas, sí; en las que me refugio buscando un parecido a ti.

Busco en ellas la ternura, cuidados, cariño y comprensión que dejaste de brindarme por tu desaparición.

De pronto creo ver en ellas tu imagen encarnada igual que divisamos en el agua la luna reflejada.

El Mes de las Madres treinta y siete veces ha pasado sin que tú, Carmen Elisa estuvieras a mi lado.

HÉCTOR DARÍO BELTRÁN ACOSTA Fusagasugá, Mayo de 2016.